Te paseas con la mascarilla en equilibrio sobre su barbilla. Quizá creas, hoy en día, que estás haciendo poesía. Si es poesía, tengo mis dudas, pero gracia no me hace ninguna. El virus entra por tu nariz, espero que no te alcance así. Protégete, conciudadano, a ver si llegamos bien al verano. Dedicado a tod@s aquell@s que me encuentro de esta guisa por la calle, inspirado por uno en particular, que se pone la mascarilla justo, justo, bajo el bigote.
Covidiota
