Cuando un@ cree que después de acabar una novela, corregirla, maquetarla, diseñar portada, escribir sinopsis y autopublicarla se había terminado lo más difícil; y que podía echarse a descansar tras un trabajo bien hecho… Se despierta del sueño: la novela no se promociona sola.
Si no hay una editorial por el medio, como es mi caso, autopublicación implica también autopromoción. Darse a conocerse en este mundo, hoy, significa ser la más pesada del ciberespacio.
Esto es lo que deduje después de una búsqueda de información en la red global, para mí muy necesaria porque era (y aún soy muchísimo) una completa neófita en redes sociales. Tengo que confesarlo, nunca me han gustado. Pero puesto que me iba a dedicar a enseñar mi trabajo y no mi vida, me decidí a unirme a ellas.
Gracias a consejos como este y otros del mismo sitio, empecé a ponerme al día. Lo primero que aprendí es que no hay un orden concreto que seguir, y que, cuando antes empieces, mejor.
Siguiendo todos los consejos, estás son las cosas que he hecho para promocionar ‘Reinicio’:
- Abrir página de venta en Booklaunch.io. Esta está muy bien porque tiene mucha visibilidad y el paquete básico, que es gratis, tiene muy buena pinta y es más que suficiente para presentar el libro con dignidad.
- Abrir este blog. El blog para un escritor es esencial para crear su marca personal y, por tanto, también lo es para una escritora ;-). Lo que más me costó es elegir un tema sobre el que hablar. Al final me decanté por explicar mi proceso como autora y seguir escribiendo mis relatos cortos (y compartir los que pueda). Al fin y al cabo, lo que a mí me gusta es escribir.
- Abrir canal en YouTube. Lo abrí sobre todo para subir el booktrailer de la novela, y después he añadido otros vídeos relacionados. Para que el canal de YouTube tuviera más repercusión, tendría que dedicar tiempo a generar contenido hablando de literatura, reseñando, o cualquier otra cosas, pero la verdad es que no lo tengo y está muy paradito 😦
- Abrir cuenta en Instagram. Este es el planeta de la imagen, todo entra y debe entrar por los ojos para que te presten un poquito de atención y, además, debe destacar. Pero es verdad que IG puede funcionar para escritores porque el fenómeno bookstagram está muy extendido. Lo que más me está gustando de estar aquí es que la gente realmente quiere ayudar. De tanto en tanto, algún desagradable aparece por ahí; pero contra el vicio de molestar está la virtud de bloquear su cuenta. Poco a poco, estoy aprendiendo a encontrar los hashtags y las composiciones que más pueden gustar. Más gusta, más reacciones, mejor te trata Instagram en cuando a difusión y visibilidad. De verdad que esta parte es súper importante. Y también lo es interactuar con seguidores y seguidos, en aplicación del «hoy por ti, y mañana por mí»: tú compartes algo mío, yo algo tuyo; y así hacemos equipo en la difusión. Y, por fin, lo que más puede ayudar, relacionado con el tema bookstagram: pedir reseñas. Aquí hay que echarle mucho morro y contactar con los bookstagrammers mediante mensaje directo para pedirles una reseña. Hay que elegirlos bien, porque lo que más abunda es la recomendación de literatura romántica. Para la fantasía y otras frikadas, que es lo mío, hay que rebuscar bastante. Pero ya he conseguido a unas cuantas (todo mujeres, es verdad) a las que he mandado una copia impresa para este menester. Crucemos los dedos para que les guste mucho, mucho…
- Abrir cuenta en Canva.com. Precisamente por lo anterior, un buen diseño de posts, trabajo en Canva, que tiene un montón de recursos. Me sirve para publicar extractos de mi libro y para diseñar buenas promos. Algunos ejemplos se pueden ver en la Galería.
- Abrir cuenta en Facebook. Esta es la que menos me gusta de todas, soy muy sincera. Pero IG la pide para hacer anuncios, puesto que los pagos se realizan mediante Facebook Pay. Afortunadamente, se pueden vincular las cuentas y todo lo que sube a IG sube a FB automáticamente.
- Abrir página de autor en Amazon. Aparte de autopublicar con KDP, Amazon te da la oportunidad de darte a conocer como autor y que te sigan, y yo lo he aprovechado a tope. Perfil, presentación, vídeos y enlaces: lo he subido todo.
- Abrir página de autor en Goodreads. Pues tres cuartos de lo mismo, aparte de dar de alta mi libro y presentarlo en el foro, puedo darme a conocer como autora y tener seguidores. Aquí, en cambio, no eres nadie si no haces reseñas, porque es un blog para LEC-TO-RES. Y gracias a eso, he descubierto que me gusta reseñar con amabilidad. Se puede mencionar lo negativo también siendo educada.
- Reabrir y actualizar mi perfil de LinkedIn. Esto ha sido lo más complicado, convertir 25 años de carrera profesional como financiera en un perfil de escritora autopublicada. Uf. Mis contactos (financieros todos también) andan intentando entender qué pasa, y yo mientras busco contactos nuevos relacionados con el mundo editorial para que todo esto tenga sentido.
- Abrir cuenta en Wattpad. Y escribir. ¿Para qué me sirve Wattpad, si la novela ya está publicada? Para publicitarla, una vez más. Cada lunes publico un capítulo de ‘Reinicio’, hasta un máximo de diez. Importante para ganar visibilidad es leer a otros autores y votar sus relatos. A ver cómo me va, que acabo de empezar con ello.
Viéndolo todo así, listado, es fácil darse cuenta de cuántas horas de trabajo hay invertidas. Y las que me quedan. Otra cosa que he aprendido es que me complace hacerlo, porque diseñar mis cositas me divierte.
Hay que entender esto como una carrera de fondo, y yo solo llevo un mes. Los resultados de todo esto tardarán en materializarse. Así que, el lío continúa…